El dictador no confió en casi nadie sobre sus planes de huir mientras su reinado se desmoronaba. Sus asesores, funcionarios e incluso familiares fueron engañados o mantenidos en la oscuridad
El dictador no confió en casi nadie sobre sus planes de huir mientras su reinado se desmoronaba. Sus asesores, funcionarios e incluso familiares fueron engañados o mantenidos en la oscuridad