En un contexto de crisis futbolística y malestar institucional, Juan Sebastián Verón rompió el silencio y dio una extensa entrevista en la que abordó todos los temas que atraviesan el presente de Estudiantes de La Plata.
La palabra de la Brujita llegó cuando el club más lo necesitaba: con dudas sobre la continuidad de Eduardo Domínguez, tensiones dirigenciales y el deseo de los hinchas por una rápida reacción.
En declaraciones al programa Primer Intento, el presidente albirrojo fue directo: “El fútbol es de momentos y la duda es parte”. Verón reconoció que no habla con el entrenador “hace tres o cuatro semanas”, pero aseguró que desde su entorno le transmiten que el DT tiene intenciones de continuar. “Si el plantel y el capitán lo avalan, y él quiere seguir, es difícil decidir que se tiene que ir”, sentenció.
La situación de Domínguez y el presente del equipo
El foco principal de la entrevista fue la continuidad de Eduardo Domínguez, tras un semestre de resultados irregulares. Aunque Verón desmintió los rumores sobre una inminente salida, advirtió: “Si esto sigue así, se va a tener que dar. Si ves que no va, no va”. Además, fue autocrítico desde su experiencia como jugador y dirigente: “Hay que entrenar cuando hay que entrenar y mejorar día a día. Yo también pasé por malos momentos”.
El próximo partido de Estudiantes será el lunes a las 19.00 en UNO ante Huracán, por la segunda fecha del Torneo Clausura. Será una prueba clave para el cuerpo técnico y el plantel.
Rojo, Gillett, Magnabosco y un club en plena transformación
Uno de los temas más sensibles para los hinchas es la posible vuelta de Marcos Rojo. Verón confirmó que hubo conversaciones y que el defensor manifestó su voluntad de regresar, pero advirtió que el principal obstáculo es su relación con los hinchas. “Primero tiene que recomponer eso. A mí no me tiene que pedir perdón”, sostuvo.

También se refirió a Foster Gillett, el inversor norteamericano que generó expectativas por su posible llegada: “Sigue estando. Todo se fue dilatando, pero es el camino que tiene que tomar el club. Hay que dejar el libreto y dar herramientas a los jugadores”.
Respecto a la polémica presencia de Carina Magnabosco, dirigente señalada por presuntamente haber ingresado a entrenamientos, Verón fue claro: “No creo que haya entrado a una práctica. Ella trabaja en un relevamiento de distintas áreas. Son cosas que hay que resolver, pero pasan”.
El legado de su padre y el cierre de una era
El final de la entrevista fue el más emotivo. Verón recordó la reciente muerte de Juan Ramón Verón, emblema máximo del club y parte de una generación dorada. “Con la partida de mi viejo, de Bocha Flores y de Cacho Malbernat, todo cambió. Eran superhéroes que caminaban por el Country y daban consejos. Ahora empieza otra etapa”.
La palabra de Verón no pasó desapercibida. Marcó un punto de inflexión en un año bisagra para Estudiantes, en el que los desafíos deportivos, económicos e institucionales se mezclan con la emoción y el peso de la historia.