El presidente Javier Milei podría anunciar en los próximos días un nuevo esquema de convertibilidad peso-dólar, inspirado en el modelo de los años 90. El plan contaría con el respaldo del Tesoro de Estados Unidos a través de un swap de US$20.000 millones, destinado a servir como puente de cinco años hacia la estabilidad económica.
Según el economista y asesor Antonio Aracre, quien anticipó la noticia en el programa Indomables (C5N), el anuncio se daría tras una reunión del mandatario con funcionarios estadounidenses, e incluso con la posible participación de Donald Trump. La iniciativa buscaría anclar el tipo de cambio y brindar previsibilidad al mercado, replicando la idea del “uno a uno” pero con un soporte financiero externo más sólido.
Un “uno a uno” con respaldo de Washington
De acuerdo con lo explicado por Aracre, el esquema tendría tres pilares fundamentales. Primero, la garantía del swap estadounidense, que funcionaría como respaldo para los compromisos financieros de la Argentina, evitando nuevos defaults. Segundo, un puente temporal de cinco años que permitiría estabilizar la economía antes de avanzar hacia una eventual dolarización. Y tercero, el aval directo del Tesoro de Estados Unidos, que aportaría confianza y podría atraer inversiones.
El asesor destacó que este “nuevo plan de convertibilidad” sería más robusto que el implementado durante la gestión de Domingo Cavallo, al contar con apoyo internacional. Sin embargo, analistas advierten que su éxito dependerá de reformas estructurales que reduzcan el gasto público y mejoren la competitividad.
Caputo negó cambios en el tipo de cambio
Mientras tanto, el ministro de Economía Luis Caputo salió a desmentir versiones sobre un nuevo régimen de convertibilidad o una devaluación post electoral. En declaraciones televisivas, aseguró que el esquema de bandas cambiarias se mantendrá sin modificaciones tras las elecciones legislativas del 26 de octubre.
Caputo ratificó que “el tipo de cambio flotará dentro de los márgenes establecidos” y aclaró que “el esquema cambiario lo define el Gobierno argentino”. También negó condicionamientos del Fondo Monetario Internacional, pese al reciente respaldo financiero de Estados Unidos que incluye el swap por US$20.000 millones.
En medio de un escenario económico volátil, las versiones sobre un eventual “1 a 1 renovado” generan expectativas y temores, mientras el oficialismo busca consolidar una señal de estabilidad y confianza internacional.