En una sesión clave y sin sobresaltos, la Legislatura de la provincia de Buenos Aires aprobó este lunes la modificación del calendario electoral, un paso fundamental luego de la eliminación de las PASO y en el marco del proceso hacia las elecciones provinciales del 7 de septiembre. El proyecto fue respaldado por todos los bloques y sancionado en una jornada que había generado expectativa por la necesidad de alcanzar los dos tercios en ambas cámaras.
El nuevo cronograma, impulsado para garantizar una mayor organización del proceso electoral, establece que la presentación de alianzas deberá concretarse el 9 de julio, las listas de candidatos se oficializarán el 19 de ese mes, y el plazo para presentar boletas vencerá el 8 de agosto. De esta forma, habrá 50 días entre el cierre de listas y la elección general, tal como solicitó la Junta Electoral bonaerense por cuestiones técnicas.
La doble sesión tuvo su inicio en el Senado provincial pasadas las 14, y una hora más tarde se convocó a los diputados. Ambas cámaras lograron el quórum y dieron luz verde al proyecto sin modificaciones, consolidando un amplio consenso entre oficialismo y oposición para avanzar con un marco legal que ordene la nueva estructura electoral.
Desde el entorno del gobernador Axel Kicillof destacaron que la decisión de desdoblar las elecciones respecto del calendario nacional fue determinante para redefinir los tiempos, brindando previsibilidad a los actores políticos, autoridades y organismos involucrados en el proceso.
Con este nuevo esquema ya aprobado, la Provincia de Buenos Aires tiene definido su camino electoral hacia el 7 de septiembre, con reglas claras y plazos ajustados que apuntan a evitar conflictos administrativos y brindar garantías en cada etapa del comicio.
