El abogado ambientalista Fernando Monticelli difundió imágenes que muestran el estado del Río Santiago y alertó sobre la falta de controles. Según sus denuncias, los líquidos provienen de una planta ubicada entre las vías del ferrocarril y la autopista, y desembocan rápidamente en la cuenca, muy cerca del punto de captación de agua potable.
La Planta de Pretratamiento de Efluentes Cloacales que ABSA opera en Berisso concentra las mayores críticas. Un informe técnico advierte que la planta no alcanza a tratar adecuadamente los desechos y que gran parte del líquido cloacal crudo termina en el río sin ningún tipo de procesamiento previo
La ONG Nuevo Ambiente denunció que la planta opera solo algunas horas al día y no tiene capacidad suficiente para tratar la cantidad de efluentes que recibe. Además, advirtió que la falta de inversión sostenida y la inacción de las autoridades agravan aún más la situación.

La Justicia Federal ordenó una serie de medidas que la Provincia y los municipios de La Plata, Berisso y Ensenada no cumplieron. Entre ellas, obligó a ABSA a retener un porcentaje de las tarifas que cobra a los usuarios para crear un fondo destinado al saneamiento y la limpieza permanente del área afectada.
El tema fue parte de una reciente reunión en el Ministerio de Infraestructura bonaerense, donde se debatió la necesidad de obras de saneamiento financiadas por organismos internacionales, con la participación de autoridades de ABSA y la Dirección Provincial de Aguas y Cloacas (DIPAC).