Marcos Gómez, padre de Kim, la niña asesinada por dos adolescentes de 14 y 17 años en La Plata, confirmó su decisión de involucrarse en política con el objetivo de honrar la memoria de su hija y evitar que se repitan tragedias similares. En medio del dolor, expresó su compromiso de trabajar por cambios estructurales en la provincia de Buenos Aires, sin alinearse con ningún espacio partidario. “Kim era de La Plata y la ciudad le pertenece”, expresó, y remarcó que su principal objetivo es que “no haya otra Kim más”.
Gómez también forma parte activa del proyecto para bajar la edad de imputabilidad, una iniciativa que ya fue aprobada en comisiones y está a la espera de su tratamiento en el Congreso. “Tomé la decisión de involucrarme en el Estado”, sostuvo, mientras la causa por el asesinato de su hija sigue avanzando en la Justicia.
El caso generó conmoción social y política, y derivó además en un pedido de juicio político contra la fiscal Sabrina Cladera, por haber liberado a uno de los presuntos responsables del crimen. El reclamo fue encabezado por el massismo, que presentó el pedido a la bicameral de enjuiciamiento de la Legislatura bonaerense, con el objetivo de apartar preventivamente a la funcionaria.
El escrito fue elaborado por el diputado nacional Ramiro Gutiérrez, la senadora Sofía Vanelli, y los diputados provinciales Rubén Eslaiman y Juan Martín Malpeli, todos del espacio que responde a Sergio Massa. El trámite formal se activará tras los feriados de carnaval, cuando se espera que el bloque massista haga la presentación en la apertura del período ordinario de sesiones.
Mientras tanto, el nombre de Kim se convierte en bandera de una lucha que ya trasciende lo personal y pone en discusión el rol del Estado y la responsabilidad de la Justicia en casos de violencia extrema protagonizados por menores.