El mediocampista Franco Torres, que había sorprendido como una de las revelaciones de la pretemporada en Gimnasia y Esgrima La Plata, sufrió una dura lesión: la rotura del ligamento cruzado anterior y menisco de su rodilla. Este diagnóstico, confirmado tras realizarse los estudios correspondientes, lo mantendrá alejado de las canchas por un período de entre seis y ocho meses.
Torres, quien retornó al club tras un paso complicado por el fútbol chileno con el Copiapó, donde su equipo descendió, había tenido un auspicioso regreso al Lobo. En los amistosos previos, se destacó marcando goles clave ante Defensor Sporting y el Sub-20 de Uruguay, mostrándose como una pieza valiosa para el esquema táctico 4-3-3 de Marcelo Méndez.
Sin embargo, su lesión representa un golpe duro para el equipo, que ya había sufrido la partida de Matías Abaldo, ahora en Defensor. La baja de Torres deja al plantel con opciones limitadas en la ofensiva, a pesar del buen desempeño de Manuel Panaro, quien también ha generado expectativas en la pretemporada.
El club deberá evaluar si decide reforzar el plantel en el mercado de pases para cubrir la ausencia de Torres y sostener el esquema que Méndez desea implementar. Mientras tanto, se espera la confirmación de la fecha para la cirugía del jugador, quien tendrá un largo camino de recuperación por delante.
Esta situación no solo afecta el armado del equipo, sino que también frustra el prometedor momento de un futbolista que parecía destinado a tener un rol clave en el Lobo durante la próxima temporada.