La nueva edición de Gran Hermano (GH) comenzó este lunes, y entre los participantes que ingresaron a la casa más vigilada del país, dos mujeres de La Plata se destacan por sus perfiles únicos: Martina Pereyra y Sandra Priore. Ambas prometen dar que hablar con personalidades que ya despertaron la curiosidad del público.
Durante la gala de apertura, el conductor Santiago del Moro presentó a los 24 jugadores que competirán por ganar el reality, destacando que esta temporada contará con perfiles «completamente diferentes». En este contexto, Pereyra y Priore se posicionaron como las embajadoras de la ciudad, con estilos y estrategias que parecen opuestos pero igualmente intrigantes.
Martina Pereyra: una estratega sin filtros
Martina Pereyra, modelo y contadora, dejó en claro que no tiene miedo de generar polémica. “Grito, puteo y levanto mucho la voz. No sé cocinar y odio limpiar”, confesó durante su presentación, dejando en evidencia su carácter fuerte. Además, se describió como extremadamente competitiva y hábil para manejar relaciones dentro de la casa. Hincha de Estudiantes de La Plata, promete ser una jugadora intensa que no pasará desapercibida.
Sandra Priore: pasión por el orden y la cocina
Por su parte, Sandra Priore mostró un enfoque completamente distinto. Amante de la pesca e hincha de Gimnasia y Esgrima La Plata, Priore destacó su rechazo hacia el bullying y su compromiso con la convivencia. “Me saca totalmente cuando alguien trata mal a otro”, afirmó. A diferencia de Pereyra, Priore disfruta de cocinar y mantener el orden, aspectos que podrían ayudarla a ganar aliados en la casa.
Dos estilos, una ciudad
A pesar de representar a la misma ciudad, las diferencias entre ambas ya generan expectativas sobre cómo interactuarán dentro del juego. Mientras Martina busca destacarse con su estrategia directa, Sandra podría apoyarse en su capacidad para construir vínculos a través del diálogo y la colaboración.
La participación de ambas promete poner a La Plata en el centro de las miradas durante esta edición de Gran Hermano. ¿Será su rivalidad futbolística un obstáculo para aliarse? Solo el tiempo lo dirá, pero lo cierto es que el público ya está atento a cada movimiento de estas platenses dentro de la casa más famosa del país.