A una semana de la reactivación de las negociaciones salariales entre la Provincia de Buenos Aires y los gremios que nuclean a estatales y docentes, el escenario sigue marcado por la incertidumbre y la falta de respuestas concretas. A pesar de las expectativas generadas, la gestión bonaerense aún no presentó una oferta salarial para abril y los plazos empiezan a jugar en contra.
En el primer encuentro del mes, las autoridades provinciales se limitaron a exponer el panorama económico y financiero, sin avanzar en ninguna propuesta de aumento. Solo quedó el compromiso de volver a convocar a los gremios “en el corto plazo”, algo que todavía no ocurrió. El reciente feriado de Semana Santa acortó la agenda y los sindicatos comenzaron a expresar su preocupación por la demora.
Uno de los gremios estatales formalizó un pedido para que se reabra de forma urgente la mesa paritaria. “Ya estamos re pasados”, admitieron desde el sector sindical, haciendo referencia a que cualquier suba debe definirse pronto si se pretende que impacte en los haberes de abril, que se liquidan a comienzos de mayo.
El último incremento otorgado por el Ejecutivo fue del 7% en febrero y un 2% en marzo, cifras muy por debajo de la inflación acumulada, según los registros del INDEC. Esta disparidad genera cada vez más presión sobre los salarios, tanto en los trabajadores del Estado como en los de la educación.
Desde los gremios reconocieron que hubo contactos informales, aunque sin avances concretos. “Vamos a esperar, calculamos que esta semana habrá algún avance”, señalaron con algo de optimismo. Sin embargo, el tiempo apremia y los plazos administrativos dificultan una liquidación con retroactividad a abril. “Excepto que hagan alguna movida informática, cosa que parece muy difícil”, explicaron fuentes gremiales.
En el caso de los docentes, la situación es similar. Aún sin novedades oficiales, trascendió la posibilidad de que se convoque a una nueva reunión entre miércoles y jueves, aunque por ahora no hay nada confirmado.
Con este escenario, todo indica que abril podría cerrar sin una mejora salarial para estatales y docentes bonaerenses, profundizando el malestar de sectores que vienen perdiendo poder adquisitivo frente a la inflación.