Una situación crítica se vivió en 531 entre 115 y 116, La Plata, cuando los «ladrones de bronce» casi provocan una tragedia al robar acoples, generando una fuga de gas que obligó a los vecinos a autoevacuarse ante el potencial riesgo de una explosión. La magnitud del incidente requirió la intervención inmediata de personal de Defensa Civil y de Camuzzi.
El robo de bronces, una práctica delictiva que ha causado estragos, tuvo consecuencias graves en esta ocasión. La pérdida de gas resultante del robo de los acoples creó un peligro inminente de explosión, llevando a los residentes a tomar medidas de seguridad y autoevacuarse. La rápida respuesta de Defensa Civil y Camuzzi fue crucial para controlar la situación y prevenir una tragedia.
Las autoridades están trabajando en la investigación del robo de bronces y la fuga de gas, buscando identificar a los responsables de este incidente que puso en riesgo la seguridad de la comunidad en La Plata.
