«Yo sigo en funciones con mi cargo en la provincia de Buenos Aires en el gobierno de Axel Kicillof en el Ministerio que conduce Florencia Saintout, como Secretaria de Cultura de Buenos Aires y cuando Pacho el año pasado me convocó, yo en ese momento estaba en una actividad oficial en Los Todos en el museo de la casa natal de Evita, un Museo que recuperamos para la provincia», recuerda. “Pacho me dice, quiero reeditar ‘Escarabajos, con lo que significa volver a poner en escena en este contexto esta obra que habla de la violencia intrafamiliar como reflejo de violencia social es todo un desafío«.
Tras el primer llamado, Victoria Onetto dudó en poder hacer la obra creyendo en no encontrar el tiempo y el modo para poder concretarlo, de la manera en la que le gusta encarar sus proyectos. “Soy muy apasionada en todo lo que hago y siempre me meto a full cuando me involucro, y los que estamos en la gestión, sabemos que el trabajo es 24 x 24, la actividad es todos los días».
Si bien la propuesta fue en 2023, los ensayos para lo que fue su estreno fines de marzo, comenzaron en febrero de este año. «Cuando me dijo que sería solo una vez por semana, en el Centro de la Cooperación en Capital y con los actores que están conmigo en escena pudimos encontrar el momento y así lo hicimos y se puso el proyecto en marcha».
La obra estrenó en el teatro Centro de la Cooperación en capital
Luego de unos meses trabajando para el público de la ciudad de Buenos Aires en Calle Corrientes, el elenco comienza a tener fechas fuera de capital. «Ahora ya asentados con la obra, el texto y la respuesta positiva del público, porque estamos agotando las entradas, gracias a Dios, iniciamos este desafío de sacar la obra puntualmente en algunas fechas, como se nos recibió en el Coliseo Podestá».
INFOCIELO: Destacaste que su autor, Pacho O´Donnell fue insistente en que seas vos quien interprete este personaje. ¿Cuándo leíste la obra, a qué le atribuiste esa insistencia de querer que seas vos y no otra, la que haga ese papel?
-«Es un papel que me cae justo en un momento de mí vida, en mi edad. En mí momento como mujer, como actriz y funcionaria con mi compromiso ideológico y político. Cuando leí la obra, vi que mi papel es un protagónico absoluto y habla, si uno lo piensa como una herramienta de transformación para poder hacer emocionar y para poder en definitiva hacer pensar, y cambiar ciertas realidades que quizá a uno no le guste de la sociedad, habla de algo que está muy presente hoy en día que tiene que ver con nada más y nada menos que con la violencia de un matrimonio con un hijo. Si esa violencia no se puede disociar de la violencia social, eso me atrajo muchísimo».
Hablar con ella, es hablar con la actriz entusiasmada en darle vida a un personaje al que no puedo dejar de vincularlo con el contexto actual, y es también hablar con la funcionaria que busca gestionar espacios culturales que inviten a reflexionar, que interpelen y haga resistencia a lo que tiende a ser incorporado como natural. «Cuando uno entiende al teatro y lo siente no solo como una herramienta de diversión y de esparcimiento, sino también como la entendemos en nuestro gobierno, como una herramienta de transformación social, el teatro pasa a ser un espacio donde podemos desarrollar un pensamiento crítico. En sí en las artes escénicas y la cultura en general, pero el teatro y esto también lo siento por ser actriz, es el lugar por excelencia donde la cultura está más viva que nunca. En escena no solo estamos los actores sino toda la cadena de valor de los seres vivos que hacen que el teatro se produzca».
Victoria Onetto «Es una historia sin víctimas ni victimarios»
“Escarabajos” trata sobre cómo entre las cuatro paredes de una familia burguesa de apariencia normal se juegan las mismas relaciones de poder, de sumisión, de extorsión, de manipulación psicológica, económica y sexual, trazando un paralelismo con el mundo exterior. Marta, Oscar y Rubén luchan por sobrevivir, apelando a sus recursos más aptos para la descarnada supervivencia, conscientes de que alguien saldrá lastimado. Y así, sobrevivir, volver a ser una y otra vez.
«El texto fue escrito en el 75 en plena triple A, previo a lo que fue el horror de la dictadura. Este matrimonio, que quiere parecer más de lo que es y con un hijo que no está y del que no se sabe, se vinculan con una persona que la suple, un personaje que está interpretado magníficamente por un actor muy joven que es Eloy Rossen y en él proyectan todas las vivencias de este matrimonio que está roto y marcado por la violencia que ejercen sobre ese hijo y sobre ellos mismos también».
«Creo que lo que se devela en el texto de Pacho es la humanidad de estos personajes y pone en foco esta fricción y esta violencia en una familia, hacia a un hijo y entre ellos mismos y lo que pasa a nivel social».
Para Onetto, es acertada esta puesta, versión 2024, porque el contexto le da vigencia a esta historia escrita casi 50 años atrás. «Hablar de esto en este momento tiene muchísima actualidad. Me parece, que hoy por hoy, estamos viviendo momentos muy peligrosos a nivel social con respecto a los discursos de la violencia y al lenguaje de la violencia, sobre todo si se ejercen de las más altas esferas del ejecutivo, eso le permite y le da la libertad a la sociedad, hablando de la famosa libertad de ejercer ese tipo de violencia en los ámbitos donde se desarrollen sus actividades interpersonales».
La obra y puesta es en homenaje al reconocido director de teatro Hugo Urquijo, quien fue el que dirigió la obra «Escarabajos» por primera vez en 1975. «Yo tuve la oportunidad de trabajar con Hugo, cuando hice cuatro años “La Mujer justa”, junto a Graciela Duffau y Arturo Bonín.
Hugo Urquijo, médico psiquiatra y director teatral falleció en enero de 2020. «Mi compañero Nelson (Rueda) trabajó mucho con Hugo. Esta es la primera vez que trabajamos juntos, pero lo vi en escena en varias oportunidades y me pareció un actor delicioso y ahora conocerlo como compañero es una grata experiencia». El equipo de «Escarabajos» trabaja y se financia como cooperativa de teatro independiente. «Esto lo hace mucho más valioso a todo lo que estamos viviendo».
En la puesta hay música en vivo la cual ejecuta Nacho Esbó. «Recurrir a un recurso como la música en vivo me parece que le suma mucho al espectáculo y eso hace que suceda la magia que sucede en Escarabajos porque hay ruiditos que esta mujer que es protagonista escucha en su cabeza que tienen que ver con esos escarabajos, esos miedos, esas fantasías, esas violencias que tiene su memoria y se te pone la piel de gallina, cuando también escuchas a esos escarabajos que están muy bien plasmados por esa música en vivo«.
Hugo Urquijo, a quien homenajean con esta versión 2024, era un director que le daba mucha importancia a la música en sus puestas teatrales. Él solía contar en sus obras vivencias internas de sus personajes a través a través de un exquisito diseño sonoro.
«Los actores somos instrumentos del texto y el músico que tenemos es un instrumento y un actor más de la escena porque vibra con nosotros cada texto y la verdad que es hermoso tenerlo en el escenario y completa un montón».
La obra seguirá recorriendo distintas ciudades del interior buscando invitar a reflexionar sobre una temática con mucho sentido para sus protagonistas en el contexto actual. «Realmente a los espectadores, y a nosotros que hacemos la obra, se nos pone la ‘piel de gallina’ cada vez que interpretamos los textos. Su historia realmente es muy contemporánea».
