El gobernador Axel Kicillof anunció su intención de impedir que Aerolíneas Argentinas sea privatizada, una posibilidad que el Gobierno nacional, liderado por Javier Milei, ha manifestado en reiteradas ocasiones. Ante este escenario, la Provincia de Buenos Aires ya estudia cuatro posibles estrategias para mantener a la aerolínea de bandera bajo control público.
«Si el Gobierno quiere privatizar o vender a un grupo amigo Aerolíneas Argentinas, la Provincia no lo va a permitir», declaró Kicillof, quien dirigió la empresa entre 2009 y 2011. Además, afirmó que la aerolínea no se vende porque representa un activo estratégico para el país.
Las opciones que evalúa la Provincia
- Asistencia técnica a trabajadores:
La primera alternativa contempla el apoyo a los empleados para que adquieran la totalidad de las acciones de la compañía mediante el Programa de Propiedad Participada, habilitado por el Decreto N° 70/2023. En este caso, el Gobierno bonaerense proporcionaría soporte técnico y logístico, sin involucrar recursos del Tesoro provincial. - Compra parcial de acciones y cesión al personal:
La Provincia podría adquirir una parte del paquete accionario mientras que el resto sería cedido a los empleados. Esta «solución complementaria» requeriría coordinación con el Gobierno nacional, gremios y trabajadores. - Adquisición total de acciones:
Otra alternativa incluye que la Provincia compre la totalidad de las acciones, sola o en colaboración con otras jurisdicciones. No obstante, este plan depende de la autorización del Congreso y un acuerdo con la administración nacional, ya que aún no existe una valuación oficial de la empresa. - Demanda ante la Corte Suprema:
Como última instancia, se evalúa presentar una demanda ante la Corte Suprema para frenar la privatización, argumentando perjuicios económicos y sociales para la Provincia. Aunque este camino legal podría enfrentar obstáculos, se considera una herramienta de presión.
El debate entre Nación y Provincia
El Gobierno nacional sostiene que Aerolíneas Argentinas genera pérdidas significativas, destacando subsidios de 664 millones de dólares en 2021 y 88 millones en 2024. En contraste, Kicillof defiende que la empresa es rentable y asegura que en 2023 no requirió asistencia financiera.
La disputa refleja la importancia estratégica de la aerolínea para ambas partes. Mientras tanto, el futuro de Aerolíneas Argentinas sigue siendo incierto, dependiendo de las decisiones que tome el Ejecutivo nacional y la capacidad de la Provincia para implementar alguna de sus estrategias.